Cómo dar una Buena impresión

Cuando eres un poco tímida, y sabes que tienes que presentarte ante personas nuevas, te pones nerviosa. Una fiesta en la que solo conoces a un par de personas y sabes que te quieren presentar a mucha gente. Una entrevista de trabajo es un claro ejemplo de la necesidad de producir una buena primera impresión. Hay quien lo hace por instinto, se le dan las relaciones, o es especialmente simpático. Pero como no sea, estas situaciones te pueden producir un gran estrés.

Hay ciertas cosas, muy sencillas que nos pueden ayudar en estas circunstancias como: en primer lugar, cuando te vas a presentar, no tenemos que pensar que somos el centro de todo, y tenemos que preguntar a quien tenemos frente a nosotros. La timidez puede ser considerada por desconocimiento como un comportamiento brusco, altivo, no hay que olvidar que no nos conocen.

En segundo lugar, como siempre nos dicen, es imprescindible el lenguaje no verbal. Es decir, las palabras no bastan, no queremos convertirnos en alguien a quien consideren con aires de grandeza, ¿o si? Yo prefiero que me consideren como soy, por lo que es muy importante mirar a los ojos a la otra persona, parece absurdo, pero hay gente que puede llegar a intimidarla cuando la miras a los ojos, y si lo haces, puede ver la fortaleza que hay en ti. Obviamente, las palabras van acompañadas del tono, y a la vez del propio lenguaje que empleamos para expresarnos, Para esto, es muy importante hablar claro, y con el lenguaje adecuado. Y si todo esto lo acompañas de una sonrisa, mejor que mejor.

Una vez que nos hemos presentado, empieza una conversación más o menos profunda en función de las circunstancias, pero lo que es fundamental, es prestar atención a lo que nos dicen, e interactuar con la mayor naturalidad posible, preguntando sobre sus intereses y compartiendo los nuestros, nos pueden sorprender. Ser nosotros mismos es muy importante, para ello es importante ser lo más transparentes en la medida de lo posible.