En ocasiones, no nos damos cuenta de que un pequeño detalle
marca la diferencia, como la mariposa que aletea al otro lado del mundo y
provoca a nuestro alrededor una tremenda tormenta. Cambiar es difícil, y más si
quieres que sea un cambio real. Pero a la vez un cambio por pequeño que se
produzca en nuestro interior, puede hacer que ya no nos conozcamos. Y si tan fácil
es no saber quienes somos, ¿cómo vamos a poder saber como son quienes nos
rodean?
Hay quien prefiere la sobriedad y no abusa de lo excesos.
Hay quien las luces de la ciudad le deslumbra y todo a su alrededor se
convierte en una paleta de vividos colores. También los hay que se definen al
intermedio, los que eligen un tono de color que ilumine su día. A mi me gustan
los grandes coloridos, brillantes, alegres, pero bien es cierto, que en
ocasiones lo menos es más, elegir una sola pieza que destaque, aporta la luz
necesaria y la sofisticación a lo más sencillo.
Sin duda, los pequeños toques marcan la diferencia!!
ResponderEliminarUn beso guapa
Moi Coquette
Yo creo que una pieza grande debe ir sola pero si tu estilo es minimalista puedes llevar varias cosas pequeñitas, yo lo hago a diario
ResponderEliminarBesos
C
Estoy de acuerdo o una cosa grande o muchas pequeñas, nunca hay que abusar para mi gusto!!
ResponderEliminarQue lindo post, fuera de los accesorios y las cosas materiales, es una gran reflexión la tuya, gracias por compartir...
ResponderEliminarBesos!! http://thefashionhaul.blogspot.mx/